domingo, 23 de febrero de 2025

Cañón del Ebro desde Quintanilla-Escalada

Nuevo recorrido por el Cañón del Ebro en su tramo entre Quintanilla-Escalada y Pesquera pero utilizando antiguas sendas y hoy muy poco transitadas. Partiendo del primero de los pueblos, subimos por un cómodo camino hasta la paramera de la ribera izquierda. Descendemos de nuevo al fondo del cañón por un estrecho y muy aéreo sendero, hasta desembocar en la ermita de la Nuestra Señora de Ebro. Retornamos cómodamente a Quintanilla-Escalada siguiendo el GR99 o Camino Natural del Ebro.  A día de hoy, y mientras siga sin levantarse el puente que unía Valdelateja con Pesquera de Ebro, es una de las mejores opciones para visitar el cañón.

Atención: no es recomendable realizar esta ruta si se sufre de vértigo pues parte de ella discurre por terreno muy expuesto con gran patio lateral. En todo caso ESTÁ TOTALMENTE DESACONSEJADO REALIZARLA CON NIÑOS.


Cañón del Ebrof

    
Llegaremos a Quintanilla-Escalada por la carretera N-623. Llegados a la localidad, cruzamos el puente sobre el río Ebro e inmediatamente en la otra orilla se halla el aparcamiento para coches habilitado no hace muchos años para los que recorren el GR99. Dejamos el coche y salimos caminando.

Plaza de Quintanilla-Escalada.

Aparcamiento junto al puente del Ebro en Quintanilla-Escalada.
Pero no estaremos mucho tiempo, en unos 300 metros, abandonamos el Camino del Ebro y tomamos por la izquierda un sendero que sube por la ladera.


Camino del Ebro GR99 cerca de Quintanilla-Escalada.
Pese a lo que pudiera parecer por las verticales paredes que vamos viendo, esta ascensión no es demasiado empinada, pues el el sendero sube en zigzag por el monte. 

El sendero de subida al páramo es cómodo y está limpio.
El bosque es espeso, pero en algunas curvas o claros podemos asomarnos hacia el cañón y descubrimos magníficas vistas sobre el cañón en el sector de Escalada. Durante el trayecto podemos hacer buenas fotos sobre el cañón a nuestras espaldas en el tramo de Orbaneja del Castillo.


Pese a lo inicialmente previsto, la subida es fácil y cómoda hasta alcanzar el páramo.

Vista del Cañón del Ebro. El pueblo que se ve es Escalada.
Tras unos  minutos de cómodo recorrido, en el que vamos ganando altura progresivamente sobre el Cañón, llegamos a la parte alta.

Alcanzamos el páramo. Al fondo, la mole del Águila.
Llegamos al páramo y continuamos, acercándonos a la carretera que se dirige a Pesquera de Ebro, por la que pasan muy pocos coches. El páramo se presenta pedregoso aunque hay algunos sembrados. Destaca frente a nosotros, la mole del monte Águila, con aspecto salvaje.


Nuestro objetivo ahora es encontrar el punto exacto en el que parte la senda que desciende hasta el fondo del cañón, a la altura de la ermita de Nuestra Señora de Ebro. Vemos desde el principio que el borde de la paramera es impenetrable por la vegetación.

Cantera de piedra abandonada.
Continuamos adaptándonos a las lindes, guiados por el GPS, a la búsqueda del punto exacto. Por el camino, desviándonos un poco, pasamos junto a una cantera de piedra abandonada.


Llegamos a un sembrado, siguiendo al linde, del lado del borde, llegamos a ese punto, oculto entre la vegetación e imposible de determinar sin un GPS. Dejamos el llano e iniciamos el descenso. En un primer tramo perdemos altura bajo cubierta vegetal, pero enseguida, salimos a descubierto. 


Pero en unos 200 metros, la cubierta vegetal desaparece y nos presentamos sobre el cañón, prácticamente en la vertical del río Ebro. El desfiladero se nos presenta en toda su grandiosidad.


La ladera a nuestra izquierda es muy vertical, debemos seguir el sendero, muy aéreo, que nunca desaparece, con extremo cuidado. Su anchura es suficiente para caminar con cierta seguridad, no obstante no debemos confiarnos ni despistarnos y toda precaución es poca. Aunque hay vegetación, una caía nos haría rodar muchos metros abajo entre la maleza.


Si nos detenemos, observamos el discurrir del Ebro al fondo del abismo. Las vistas son impresionantes.


A nuestra derecha los cantiles rocosos caen desde el páramo en vertical formando pequeñas cuevas y abrigos.



Por fortuna el sendero es firme, no hay ningún punto en que esté tan dañado o interrumpido y que nos obligara a paso arriesgado. Aún así, la anchura no es mucha y caminamos con mucha precaución por el patio es vertical.


Tras una marcha de unos diez minutos, el sendero se introduce en la espesura de nuevo e inicia un descenso más pronunciado. El hecho de caminar bajo cubierta vegetal nos da mucha confianza y perdemos altura con rapidez.

Ermita de Nuestra Señora de Ebro.
A medida que perdemos altura, la pendiente se va aminorando y el sendero se hace más y más cómodo. Casi sin darnos cuenta, y no sin cierto alivio, desembocamos sobre el GR99  de nuevo y junto a los muros de la ermita de Nuestra Señora de Ebro.


El paraje es excepcional para parar, descansar y recuperarse. Junto al templo, un edificio de estilo clasicista, se halla la casa del ermitaño, que estuvo viviendo en ella para atender la ermita hasta muy entrado el siglo XX.


Lo que nos queda para retornar a Quintanilla-Escalada es muy sencillo, simplemente seguir el Camino del Ebro. El entorno de la ermita es muy bueno para relajarnos, beber agua. Hay una fuerte y si hace buen tiempo, hasta podemos bañarnos en el río Ebro.

Retornamos por el Camino del Ebro hacia Quintanilla-Escalada.
Durante esta excursión pudimos ver un vehículo junto a la ermita, aunque no estamos seguros de que se pueda acceder libremente.


Una vez hemos descanso y disfrutado del paraje, solo tenemos que deshacer los 4,5 kilómetros que nos separan del punto de partida. Lo realizamos cómodamente por el Camino del Ebro, sin apenas desnivel. En este trayecto lo más destacable es el canal del Ebro. Se construyó para aprovechar el desnivel del río al atravesar un gran meandro y así generar energía para mover las turbinas de la Central Eléctrica del Porvenir una de las primeras de producción de energía eléctrica de la provincia de Burgos. Esta central se halla cerca de la ermita en dirección a Pesquera de Ebro.


Durante muchos kilómetros caminamos junto al canal y en algunos puntos podemos asomarnos. Veremos también el punto exacto en el que el agua se introduce en el túnel de 500 metros que atraviesa el espolón rocoso.


Tranquilamente llegamos al parking de Quintanilla-Escalada. Antes de irnos, si no lo conocemos, podemos visitar esta población, muy interesante, con buenas casas blasonadas entre callejones estrechos y buenas muestras de arquitectura tradicional.


CAÑÓN DEL EBRO DESDE QUINTANILLA-ESCALADA
Espacio natural
Cañones del Ebro.
Dificultad
Media. El camino de ascenso es muy sencillo y cómodo, la bajada en cambio requiere cierta precaución porque está algo expuesta.
Tipo de camino
Senderos por las laderas, terreno abierto en el páramo y pista del GR99 Camino Natural del Ebro.
Ciclable
Todo el recorrido es ciclable excepto el descenso desde el páramo al río que es muy expuesto.
Agua potable
Encontramos en la ermita.
Tipo de marcha
Circular.
Orientación
Solo hay señalización en el GR99. Necesario llevar GPS para encontrar en el páramo el punto exacto desde donde parte el sendero de descenso al Ebro.
Época recomendable
En general todo el año. Con niebla, el sendero de descenso puede resultar arriesgado.
Inicio
Quintanilla-Escalada.
Distancia de Burgos
58,7 kilómetros.
Tiempo total
3 horas 15 minutos (incluye una larga parada en la ermita de Ntra Sra de Ebro)
Tiempos de marcha
Quintanilla-Escalada-Ermita Nuestra Señora de Ebro: aprox. 1 hora 30 minutos; Ermita-Quintanilla-Escalada: 1 hora.
Distancia total
8,3 kilómetros.
Interés
Vistas sobre el cañón tanto en el ascenso como en el descenso. Ermita de Nuestra Señora de Ebro, posibilidad de bañarse en verano (junto a la ermita), arquitectura tradicional de Quintanilla-Escalada.
Altitud mínima
644 m.
Altitud máxima
848 m.
Desnivel acumulado
408 m.

h
h
Notas:
- De nuevo insistimos en que esta ruta está muy desaconsejada si no se está si se tiene cierto temor a la alturas ya que discurre durante unos 200 metros por un camino muy expuesto.
- El resto de la excursión es relativamente sencillo al discurrir por terreno llano. De nuevo, insistimos en la necesidad de llevar el punto exacto para descender desde el páramo en un GPS porque no es visible
- Si queremos visitar la Central del Porvenir, solo tenemos que continuar desde la ermita unos 600 metros en dirección a Pesquera de Ebro. Junto a ella, veremos los restos del puente que se derrumbó en 2018 en una crecida del Ebro. A día de hoy (febrero de 2025) sigue sin repararse impidiendo completar la clásica ruta entre Valdelateja y Pesquera de Ebro pasando por Cortiguera.



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Perfil de elevación



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martes, 4 de febrero de 2025

Valle del Nela y Castro de Brizuela

Atractiva y muy amena excursión de nuevo por las Merindades, esta vez por el Valle del Nela. Partiendo de la localidad de Escaño, recorremos las riberas del alto Nela atravesando un bonito desfiladero y pasando por varios pueblos. Durante el retorno ascendemos al Castro de Brizuela, uno de los asentamientos celtibéricos más grandes y mejor conservados del norte de Burgos.



Valle del Nelaf

Iniciaremos la excursión desde Escaño, a solo 6 kilómetros de Villarcayo. Llegaremos desde Burgos saliendo por la CL-629 hasta esta última localidad, donde tomaremos el desvío hacia Puentedey. En menos de 10 minutos llegamos a Escaño. Junto a la carretera, frente a la bellísima iglesia románica, estacionamos el coche y nos disponemos para la marcha.

Iniciamos la marcha en Escaño.
En un primer momento, saldremos del pueblo cruzando el río Nela por el puente que hay en la salida hacia Salazar. Al otro lado, atravesamos la vía verde del Santander-Mediterráneo.

Cruzamos el río Nela.
Unos metros después, sale a nuestra derecha otro camino que sigue en dirección N-NO.

Avanzamos unos metros por la Vía Verde del Santander-Mediterráneo.
Este camino avanza entre prados y terreno ondulado, sencillo. Se halla en buen estado. Más adelante, gira hacia el este y continua en paralelo a la línea montañosa que cierra el Valle del Nela por el norte. Aunque sigue en paralelo al río Nela, no lo podemos ver a nuestra izquierda.

Camino de Escaño a Sobrepeña.
Durante este recorrido es fácil que encontramos ganado pastando por este tranquilo valle. Ya desde lejos visualizamos la pequeña localidad de Sobrepeña, en donde entramos saliendo del camino por nuestra derecha.


Sobrepeña


El pueblo tiene buenas muestras de arquitectura tradicional y una aceptable iglesia. Ha sido muy rehabilitado y todas sus calles y casas están en perfecto estado. Nos damos una vuelta por él y salimos por la carretera en dirección a Nela. Unos pocos metros después, se halla el desvío a la ermita de la Virgen de la Paz, adonde se llega en 100 metros desde el asfalto. El templo, de sencilla construcción, es lugar de romería de los pueblos de la zona y se disfrutan de muy buenas vistas alrededor al estar situado en un saliente sobre el valle. En particular destacan las vistas sobre la cercana e impresionante Peña Dulla, cuyas abruptas laderas occidentales cierran el  horizonte por el este. Podemos ver muy bien los barrancos que la recorren por su interior. Retornamos de nuevo a la carretera y continuamos aproximándonos ahora hacia el río Nela de nuevo.

Recorremos un pequeño tramo por carretera entre Sobrepeña y Nela.
Iniciamos un ligero descenso y enseguida llegamos a las primeras casas de la localidad de Nela. Su exiguo caserío se arracima sobre la ladera que cae sobre el río. La tranquilidad y el silencio son totales.


Nela


Lo más destacable es su pequeña iglesia con algunos elementos románicos. Justo al lado del templo tomamos un sendero, al principio poco perceptible, que bajo cubierta vegetal desciende hacia el río, entrando pronto en el desfiladero del Nela.

El sendero discurre junto al roquedo junto al río Nela.
Pasamos por el paraje más espectacular y bonito del recorrido, donde el río se estrecha para atravesar el potente anticlinal que procede desde el este de la Dulla y se prolonga hasta Cigüenza. El río lo ha horadado transversalmente formando una cluse.


En algún punto podemos acercarnos a la orilla y contemplar los bonitos parajes que va creando el río. El recorrido por el desfiladero es corto y salimos pronto a terreno abierto. Cruzamos de nuevo el río por un puente y nos presentamos en las puertas del pueblo de Brizuela.


Brizuela



Brizuela será el pueblo mayor de cuantos visitamos hoy y se halla atravesado por la carretera que une Villarcayo con Puentedey y por él pasaba también el ferrocarril Santander-Mediterráneo recientemente rehabilitado para uso como vía verde. De hecho vemos varios ciclistas pasando por él. Lo más destacable es una casa palaciega con varios escudos y ventanas ornamentadas en su fachada, la iglesia de San Cristóbal y la ermita de Santa Ana, algo alejada, pero adonde merece la pena acercarse.

Ermita de Santa Ana de Brizuela.
Salimos del pueblo por la vía verde en dirección este pues estamos volviendo hacia Escaño.

El Castro de Brizuela visto desde el pueblo.
Pero antes, visitaremos el Castro de Brizuela, una gran peña, en principio de aspecto inaccesible que vemos desde Brizuela. 

Salimos de Brizuela de nuevo por la vía verde del Santander-Mediterráneo.
En apenas 600 metros desde Brizuela, sale por nuestra izquierda un sendero que sube hacia la ladera norte de la peña.

Sendero de ascenso al Castro de Brizuela.
Este sendero gana altura con suavidad pasando por los farallones de la vertiente sur, inaccesibles, y nos deja precisamente al oeste de la peña junto a la entrada al yacimiento arqueológico. Toda la ladera sur y la planicie superior estuvo ocupado por un gran poblado celtibérico, de la Edad del Hierro y se pueden ver muchos vestigios, algunos aún en proceso de excavación y prospección arqueológica en el verano de 2024.


Es fácil recorrer la ladera sur de la peña, donde se hallan los restos arqueológicas. Aunque no hay una señalización, podemos seguir intuitivamente el sendero que poco a poco va ascendiendo hasta la cresta. En este recorrido veremos restos de cabañas, muretes, fosos que proceden de la ocupación que hubo en la Edad del Hierro y se prolongó posiblemente hasta la Edad Media.


Tras una sencilla ascensión entre carrascas y encinas, alcanzamos la cresta. Aquí disponemos de buenas vistas sobre el valle transversal del Nela, donde se hallas las localidades de Escalo, Brizuela y se prolonga hasta el cercano Puentedey que se ve al fondo hacia el oeste.


Acumulaciones de piedras procedentes de antiguos muros y construcciones.

Asomados hacia el sur divisamos la prolongación de la sierra hacia la Peña Dulla.
Recorremos la cresta a cierta distancia de seguridad hacia el oeste. Pasamos por varios restos de antiguo muros y restos de construcciones. En el extremo occidental de la peña enlazamos de nuevo con el sendero por el que subimos y por él bajamos y enlazamos de nuevo con la vía verde.




Por la vía verde solo tenemos que cubrir los escasos dos kilómetros llanos que nos separan de Escaño. Durante este recorrido nos cruzamos con muchos ciclistas. El tramo en que estamos, entre Oña y el túnel de la Engaña se rehabilitó e inauguró a finales del 2023 y enlaza con el tramo meridional que proviene de Burgos. En definitiva, desde la capital podemos recorrer más de 90 kilómetros por el antiguo trazado del Santander-Mediterráneo sin bajarnos de la bicicleta.


Trinchera en el trazado de la vía verde.
Vía Verde: puente sobre el río Nela cerca de Escaño.
Antes de irnos de Escaño, si no lo conocemos, es recomendable visitar la iglesia románica de San Salvador, una de las mejores de las Merindades.

Iglesia románica de Escaño.


VALLE DEL NELA Y CASTRO DE BRIZUELA
Espacio natural
Valle del río Nela (Merindades).
Dificultad
Medio-baja. Todo el recorrido, es prácticamente llano y sin dificultades reseñables. La subida al castro es muy fácil y sin grandes pendientes.
Tipo de camino
Pistas entre sembrados, Vía Verde del Santander-Mediterráneo, senderos en las partes más angostas del desfiladero del Nela y subida al Castro de Brizuela por terreno libre.
Ciclable
Todo el recorrido es ciclable en BTT, incluido el castro (aunque tener precaución si rodamos por el borde sur de la peña).
Agua potable
Encontraremos en todos los pueblos por donde pasamos.
Tipo de marcha
Circular.
Orientación
Aunque está bastante bien señalizado y es muy intuitivo, es recomendable llevar GPS para no dudar en algunos cruces.
Época recomendable
Todo el año. Atención a las épocas lluviosas y días de niebla que pueden arruinarnos la excursión.
Inicio
Escaño.
Distancia de Burgos
80,6 kilómetros.
Tiempo total
Calcular unas cinco horas y media incluyendo largas paradas en todos los pueblos y ermitas por las que pasamos, así como una visita detenida al castro.
Tiempos de marcha
Escaño-Sobrepeña: 1 hora; Sobrepeña-Nela-Brizuela: 1 hora 5 minutos; Brizuela-Castro-Escaño: 2 horas 25 minutos (el ascenso, recorrido y descenso del castro puede ocupar aprox. 1 hora y media).
Distancia total
16,5 kilómetros.
Interés
Desfiladero del río Nela, templos de Brizuela y Escaño, Castro de la Edad del Hierro de Brizuela, paisajes, ermitas de la Paz y Santa Ana, arquitectura tradicional de las Merindades.
Altitud mínima
615 m.
Altitud máxima
803 m.
Desnivel acumulado
455 m.



Notas:
- La excursión es relativamente sencilla en términos técnicos, ya que tiene muy poco desnivel y es muy intuitiva todo su recorrido. Solo tenemos que preocuparnos en coger los desvíos correctos.
- Contra lo que en un principio pudiera parecer, la subida al Castro de Brizuela es muy sencilla y merece la pena ya que aparte de observar muchos restos del castro celtibérico que hubo en la Edad del Hierro se disfrutan de inmejorables vistas del valle desde la cresta cimera.
- En ninguno de los pueblos por los que pasamos hay cantina bar (al menos fuera de la estación del verano). Escaño se halla muy cerca de Villarcayo y de Puentedey donde encontramos establecimientos para comer y descansar.


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Mapa topográfico



Perfil de elevación


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