Sendas de Burgos: La Caldera de Bustillo del Páramo

lunes, 18 de junio de 2018

La Caldera de Bustillo del Páramo

Corta pero atractiva excursión primaveral por la comarca de Villadiego, recorriendo solitarios parajes. En esta ocasión, partiendo del pueblo de Bustillo del Páramo, visitaremos la Caldera, una pequeña garganta cercana a esta localidad.

La Calderaf

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Llegaremos a Bustillo del Páramo saliendo por la carretera de Burgos a Aguilar. Tras pasar el cruce a Huérmeces, estamos atentos a tomar el desvío por la izquierda a Villadiego. Tras dejar las casas del pueblo de la Nuez de Arriba a la izquierda de la carretera, ascendemos al páramo y nuevamente descendemos hasta Coculina.

Bustillo del Páramo

Desde aquí tomamos la carretera que por Hormazuela primero, nos deja finalmente en Bustillo del Páramo. El pueblo se halla al final de la carretera,en un aislado y bucólico lugar. Estamos en primavera y los campos brillan en verdor.
Las casas del pueblo se hallan en buen estado y encontramos muchos vecinos una mañana de sábado. Dejamos al coche al final del caserío, en una rotonda, junto a un pilón.

Salimos de Bustillo por una pista.

Emprendemos la marcha saliendo por la pista que sale del pueblo por su lado oriental, dejando algunas casas abandonadas a la izquierda. El camino es amplio y se dirige, entre prados y sotos, hacia el paraje de la Caldera, a donde nos dirigimos. En todo momento discurre paralelo el río de Bustillo, que nos acompaña por nuestra derecha.

Ya divisamos a lo lejos los riscos calizos.

En unos cinco minutos, dejaremos a la izquierda un camino que será por el que regresemos y seguimos de frente. Poco a poco vamos girando a la izquierda, penetrando en terreno arbolado.

Seguimos por la pista que se dirige a Acedillo.

Casi media hora después de haber iniciado la marcha, nos incorporamos a una amplia pista de tierra de color rojizo, que sale a nuestra izquierda. Esta pista continuará hasta el pueblo de Acedillo, pero al poco de haberla tomado, ya veremos la pequeña garganta de la Caldera a nuestra izquierda, al otro lado de unos prados.

Cruzamos el río de Bustillo por un pequeño pontón de maderos.

Junto a la pista, discurre el arroyo de Bustillo, que cruzaremos por un pequeño pontón de tablones.Seguimos por la otra orilla por terreno abierto avanzando por el prado. En apenas cinco minutos, llegamos a la entrada del pequeño desfiladero que ha excavado un pequeño regato de agua.

Entramos en el paraje de la Caldera siguiendo el curso del arroyo.

Atravesamos esta pequeña garganta. La primavera ha sido muy húmeda y lleva agua, así que deberemos cruzarlo en repetidas ocasiones por el interior. Una tenue trocha se abre paso entre la vegetación, no es complicado avanzar. El paraje es muy sugestivo: solitario, altas paredes a ambos lados, rumor del agua del arroyo ...

Llegamos hasta el otro lado, que cierra el desfiladero por una bonita cluse. Delante tenemos una amplia llanura que nos separa de los altos del Perul, y los pueblos de Acedillo y, más alejados, Quintanilla Pedro Abarca y Ruyales del Páramo.

Vista de la Caldera desde su salida norte.

Es en este punto donde debemos regresar a Bustillo. No hay caminos ni senderos, el plan es simplemente rodear el monte que tenemos a nuestra izquierda hasta alcanzar el arroyo Dujuelo por el cual regresaremos al pueblo.

Continuamos monte a través camino del arroyo Dujuelo.

Así pues cruzamos el arroyo de nuevo y continuamos a media ladera del monte. Aunque encontramos muchos arbustos y hierbas altas, no tenemos grandes problemas. En algunos puntos debemos remontar la ladera subiendo por el roquedo.

A nuestra derecha, divisamos un inmenso espacio vacío solo limitado por el Monte Perul y los aerogeneradores que lo coronan.

Panorámica de los altos del Perul, con el pueblo de Acedillo en primer término.

Detalle ampliación del pueblo de Acedillo.

En breve tiempo, llegaremos al arroyo Dujuelo, que ha excavado otra pequeña garganta sobre la roca del páramo.

Entrada del pequeño desfiladero del arroyo Dujuelo.

Desde la ladera por la cual avanzamos, divisaremos este pasillo fácilmente y descendemos hasta él para penetrar en su interior.

Pese a su apariencia desde arriba, el interior del arroyo, seco completamente, es posible avanzar y no tenemos grandes problemas para abrirnos paso entre la vegetación. Tras salvar su tramos más angosto, continuaremos por su lado derecha, dejando unos prados de hierba alta a la izquierda.

El arroyo Dujuelo ha excavado un pequeño paso de montaña por el cual retornamos a Bustillo.

Una vez totalmente fuera ya, en el llano, continuamos por un marcado camino que va girando poco a poco hacia la izquierda, para en poco, desembocar en la pista por la cual salimos de Bustillo.

Ya en el llano, cerca de Bustillo del Páramo.

Ya en él, solo tenemos que desandar los escasos quinientos metros que nos separan de las casas de Bustillo del Páramo, visible desde lejos.

Entramos de nuevo en Bustillo del Páramo.

SENDERO DE LA CALDERA
*Espacio natural*	La Caldera, enmarcado en calizas de la comarca de Villadiego.
*Dificultad*	Media, el paso de la Caldera, aunque no complicado, puede estar lleno de maleza.
*Tipo de camino*	Senderos y campo abierto en el retorno.
*Ciclable*	No.
*Agua potable*	Encontraremos en el pueblo y en los arroyos que vamos encontrando.
Tipo de marcha	Circular.
Orientación	Media, el desvío a la Caldera y el itinerario de regreso por el arroyo de Dujuelo no está señalizado.
*Época recomendable*	Primavera, verano.
*Inicio*	Bustillo del Páramo.
*Distancia de Burgos*	54,4 kilómetros.
*Tiempo total*	1 hora 45 minutos.
*Tiempos de marcha*	Bustillo del Páramo-La Caldera: 40 minutos; La Caldera-Bustillo del Páramo: 55 minutos.
*Distancia total*	5,13 kilómetros.
*Interés*	La Caldera, paisaje primaveral, panorámicas sobre el Perul.
*Altitud mínima*	935 m.
*Altitud máxima*	1028 m.
*Desnivel* *acumulado*	115 m
*Mapas*	1:50000: 0166 Villadiego. 1:25000: 0166-4 Villadiego.

Notas:
- La excursión es sencilla en cuanto a su longitud, podemos fácilmente realizar en un par de horas. Sin embargo la orientación no es evidente, debemos estar atentos a los cruces y desvíos necesarios.
- El paso de la Caldera no es dificultoso, únicamente en primavera podemos debemos tener precaución en cruzar el arroyo por los sitios más apropiados. El resto del año permanece seco su cauce.
- Todos los pueblos de la comarca de Villadiego poseen recias casas de piedra algunas de ellas blasonadas. Si tenemos tiempo, podemos detenernos en los pueblos de Hormazuela y Coculina, de camino a Bustillo del Páramo. En este segundo, destaca su iglesia románica.