sábado, 27 de noviembre de 2021

De Burgos a los Marmellares en bicicleta

El llamado Alfoz de Burgos, comarca que ocupa el centro de la provincia con la capital como centro, es rico en caminos y pistas para la práctica de la bicicleta de montaña. En esta ocasión, recorremos la parte N-NO. Saliendo por el barrio de Villalonquéjar, remontamos el páramo para continuar hasta los dos Marmellares pasando por la localidad de Páramo del Arroyo. Seguiremos por pistas siguiendo erosionados vallejos hasta descender a Villanueva Río-Ubierna, punto más alejado de la excursión. Retornamos a Burgos pasando aún por otros dos pueblos: Sotragero y Villarmero, junto a la Vía Verde Santander-Mediterráneo. Todo el recorrido es muy ameno e ideal  para una mañana, siempre con tiempo seco.


Alfoz de Burgos Nortef

Vista veraniega de los páramos del Alfoz de Burgos en su sector NO.

En esta salida hemos planeado un recorrido intentando evitar lo máximo posible utilizar carreteras enlazando pueblos por pistas. Los Marmellares se ubican al NO. de la ciudad. Salimos de la ciudad siguiendo el carril bici junto al río Arlanzón en dirección oeste, buscando nuestro primer destino, el barrio de Villalonquéjar.

Salimos por el carril bici siguiendo el río Arlanzón.
Podríamos llegar hasta el cruce del barrio del Pilar y continuar hacia Villalbilla de Burgos, siguiendo entonces el Camino de Santiago para torcer hacia Villalonquéjar, pero esta vez preferimos desviarnos por la derecha siguiendo la calle León hacia un gran puente sobre el río Arlanzón que se dirige hacia la urbanización de San Pedro de la Fuente.

Camino junto del Arlanzón hacia Villalonquéjar.
Pero no pasamos el puente, sino que justo antes, saldremos por la izquierda para incorporarnos a un buen camino que sigue a corta distancia paralelo a la orilla del río. Es una magnifica vía, rodamos unos kilómetros entre chopos, nos cruzamos mucha gente haciendo deporte. Esta pista se desarrolla sin interrupción siguiendo el Arlanzón hasta el puente de Villalonquéjar.

Puente sobre el Arlanzón en Villalonquèjar.
Lo atravesamos y entramos en las calles de Villalonquéjar, antiguo pueblo, hoy barrio de Burgos. De pequeñas dimensiones, pasamos por su centro, dejando la iglesia de Santa María Magdalena y la plazuela a la derecha y salimos por el lado oeste de la localidad.

Atravesamos las calles de Villalonquéjar hacia la depuradora

Seguimos ahora la carretera que se dirige hacia la cercana depuradora de aguas, ubicada a escasos doscientos metros.


Dejamos la entrada a las instalaciones a la izquierda y continuamos por esta vía que gira hacia el norte y se dirige hacia un túnel inferior que atraviesa la circunvalación NO. Pasamos. Al otro lado, entramos en el pinar.

Subimos al páramo por una pista forestal dejando el valle del Arlanzón atrás.
Es aquí donde dejamos el valle del Arlanzón y la ciudad de Burgos para adentrarnos ya en las pistas y caminos del páramo por terreno más abierto y despejado. El asfalto desaparece y se convierte en una amplia vía. Remontamos el desnivel entre el valle y el páramo por el interior del pinar.

Una vez en el páramo continuamos por pistas hacia el norte.
Tras describir un par de curvas, nos plantamos sobre la planicie. El paisaje cambia radicalmente. La pista se mantiene y se dirige hacia el norte. Rodamos entre gigantescos molinos con cierta comodidad, paisaje agrario. En unos trescientos metros, iniciamos un lento descenso por una vaguada tras la cual subimos un talud para bajar de nuevo esta vez hacia la localidad de Páramo del Arroyo.

Descenso a Páramo del Arroyo.
Este pequeño pueblo pertenece al municipio del Alfoz de Quintanadueñas pero su apartada ubicación, en lo alto del páramo (aunque al resguardo de un pequeño vallejo), y donde muere la carretera, hace que sea muy poco visitado. Entramos en sus calles, donde destaca la plaza con la gran fuente-pilón y la iglesia de San Vicente, emplazada en un alto. Al igual que todos los pueblos de esta zona, admiramos también recias casonas de piedra. Abandonamos el pueblo por su lado NO. saliendo por una pista polvorienta.

Páramo del Arroyo


Subimos al páramo de nuevo y llaneamos de nuevo entre molinos. Nuestro próximo destino es Marmellar de Abajo, distante unos dos kilómetros y medio.

Vista veraniega de Páramo del Arroyo.
El pueblo se ve desde lejos, el descenso desde el páramo es paulatino y suave. Los dos marmellares se ubican en el interior de un alargado valle recorrido por el río Carramarmellar y el arroyo del Prado. Entramos en las calles de Marmellar de Abajo.


Marmellar de Abajo

Pueblo de amplias y despejadas calles, destaca la mole de su iglesia, ubicada en su parte alta, sobre la ladera, y dedicada a La Natividad de Nuestra Señora. Aprovechamos para repostar agua en la gran fuente de piedra que hay junto a su fachada principal, a los pies de su escalinata. Para salir del pueblo, tomamos la calle que rodea el templo por su izquierda y supera el pequeño altozano donde se ubica y divide el pueblo en dos barrios. Descendemos al otro barrio.



Allí, nace un camino por la derecha, más estrecho, pero en buen estado, por el cual abandonamos, entre huertos, Marmellar de Abajo.

Iglesia de la Natividad de Nuestra Señora de Marmellar de Abajo.
Este camino se dirige hacia el otro marmellar, el de arriba, siguiendo siempre por el interior del valle del río del Prado y sin posibilidad de extravío.


Este recorrido es muy agradable, durante unos kilómetros, disfrutamos del silencio del valle, donde algunas manchas de arbolado en las laderas rompen la desnudez del páramo. Cruzamos el arroyo, prácticamente seco en verano, y seguimos manteniendo ahora la orilla a nuestra derecha. Tres kilómetros después, entramos en las calles de Marmellar de Arriba.

Camino de Marmellar de Abajo a Marmellar de Arriba.

Marmellar de Arriba


Justo a la entrada, a mano izquierda, algo elevada sobre el caserío, se encuentra solitaria la iglesia de Santa Centola.


El pueblo tiene una disposición alargada, siguiendo la dirección del valle. Lo atravesamos por su calle central, larga y estrecha, bastante concurrida en una mañana de fin de semana. Salimos por el extremo este del pueblo. Continuamos por el valle aguas arriba.


La pista se ensancha y en pocos metros, tras pasar por un pequeño soto, desemboca sobre la carretera de Arroyal a Mansilla de Burgos. Cruzamos.


Justo al otro lado, sale la pista agraria por la que debemos continuar. Este camino discurre entre sembrados, ya segados, y sigue la orilla de un exiguo arroyo, ubicado a nuestra derecha. Este vallejo poco a poco se va estrechando. A medio recorrido, la pista gira a la izquierda para ascender hacia el páramo.


Podemos tomar esta alternativa pero preferimos continuar por el fondo de la vaguada ya que vemos en el GPS que al final de él confluyen las dos alternativas sobre una gran pista transversal. Será la que debemos tomar para dirigirnos a nuestro próximo destino, la población de Villanueva Río-Ubierna.

Rodamos por el páramo antes de descender a Villanueva Río-Ubierna.
Más adelante, comprobamos que el camino se difumina algo y tenemos que continuar unos cuantos metros por la áspera linde de un sembrado. Sin excesivas dificultades, en breve, alcanzamos por fin la pista mencionada, torciendo a  la derecha. Ascendemos un poco y nos plantamos de nuevo sobre la paramera. La vía es amplia y cómoda, seguimos por ella unos metros buscando el descenso hacia Villanueva Río Ubierna, aún oculto. Aquí debemos estar atentos al track de nuestro GPS porque son varios los desvíos que nos salen a ambos lados y que se dirigen hacia los pueblos vecinos de Celadilla-Sotobrín o Las Rebolledas. Llegados al borde del páramo, visualizamos a nuestros pies el amplio Valle del Ubierna. Iniciamos el descenso hacia el llano.

Descenso a Villanueva-Río Ubierna.
Este descenso es más problemático de lo esperado porque la pista está en muy mal estado. La pendiente es fuerte y la erosión ha removido el firme en las curvas. Encontramos profundos surcos y roderas que nos hacen tener que desmontar de la bici en un par de ocasiones. Sin mayores contratiempos, entramos en las amplísimas y despejadas calles de Villanueva Río Ubierna.

Villanueva-Río Ubierna.
La localidad se emplaza en un tranquilo paraje a los pies del páramo, lejos de las vías principales del Alfoz, pero bien comunicada con Sotopalacios. Amplias y despejadas calles con buenas casas de piedra.


Villanueva Río-Ubierna


Visitamos la localidad, siguiendo la amplia calle central. A un lado, dejamos la iglesia de San Juan Bautista, que domina el caserío desde un alto. Villanueva es buen lugar para hacer un alto, beber agua, comer algo y descansar en algunos de los bancos. Aunque no estamos excesivamente lejos de Burgos, sí que nos quedan aún unos cuántos kilómetros por lo que tampoco nos detenemos mucho. Continuamos.

Centro de Villanueva Río-Ubierna.

Iglesia de San Juan Bautista, de Villanueva Río-Ubierna.
Saldremos de Villanueva por la carretera de Sotopalacios, que sale justo desde la parte baja de la iglesia. Solo tenemos que rodar unos trescientos metros por el asfalto para abandonar la carretera por la derecha incorporándonos a un amplio camino por terreno llano. Nos dirigimos ahora hacia la localidad de Sotragero. Avanzamos entre sembrados, paisajes estivales del Valle del Ubierna, uno de los más productivos, sino el mayor según algunos estudios, de toda España.


Pequeño soto con fuente lavadero y bancos entre Sotragero y Villanueva Río-Ubierna.
La distancia entre Villanueva Río Ubierna y Sotragero por esta pista es de casi tres kilómetros y medio por terreno llano. A medio camino, atraviesa un pequeño soto o isla verde donde encontramos por sorpresa una pequeña área recreativa con una fuente y bancos, parece un lugar muy agradable en los meses de verano. El resto del recorrido es prácticamente recto hasta Sotragero, en donde entramos por su lado este.

Sotragero


La localidad es quizás la mayor de todas las visitadas hoy, al ser residencia habitual de muchos trabajadores de Burgos y solo es menor en tamaño a la muy cercana Quintanadueñas. Las nuevas urbanizaciones de adosados se mezclan con las casas de piedra del pueblo antiguo.

Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, en Sotragero.
Atravesamos el pueblo por sus calles, pasando por su pequeña plaza y la iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, de grandes dimensiones. Muy cerca, desembocamos en la carretera que cruza la localidad de sur a norte y se dirige a Villanueva Río-Ubierna. Pero no seguimos por ella sino que salimos del pueblo por la derecha, siguiendo un amplio camino que sigue la orilla del Ubierna y que se dirige hacia a la cercana localidad de Quintanadueñas, capital del alfoz del mismo nombre.


Este camino es muy agradable y es utilizado por los  residentes de los dos pueblos para pasear. Si no conocemos Quintanadueñas, es buena idea acercarse hasta él pues se halla muy cercano. Nosotros, a medio camino, salimos por la izquierda de él, atravesamos el río Ubierna por un pequeño puente y entramos en las calles de la pequeña localidad de Villarmero, otra de las localidades pertenecientes al Alfoz de Quintanadueñas y última de las que visitaremos hoy.
 
Villarmero

Villarmero: área recreativa junto al puente sobre el Ubierna.

Villarmero, iglesia de San Martín Obispo.
Atravesamos la carretera que cruza el pueblo y lo abandonamos pasando junto al templo de la localidad, la iglesia de San Martín Obispo, que dejamos a nuestra izquierda. Seguimos ahora por una pista que se dirige al encuentro de la cercana Vía Verde Santander-Mediterráneo, pues sabemos que está rehabilitada en este tramo de Burgos a Sotopalacios desde hace unos pocos años y nuestro plan es retornar por ella a la ciudad.

Continuamos unos metros por la Vía Verde Santander-Mediterráneo hasta entrar en el polígono industrial de Villalonquéjar.
Nos incorporamos, torciendo a la derecha. La vía discurre algo elevada sobre el flanco sur del Valle del Ubierna, junto a algunos oteros. Disfrutamos de extensas vistas sobre el valle y sus pueblos. El suelo de zahorra es excelente, rodamos rápido, acercándonos cada vez más al polígono industrial de Villalonquéjar.


Pero antes, debemos atravesar un gran puente elevado que salva la carretera que se dirige al Polígono de Villalonquéjar y Quintanadueñas para penetrar por el otro lado en la calle Merindad de Cuesta Urría. Avanzamos entre fábricas, sin apenas tráfico en fin de semana.

El carril bici atraviesa el polígono de Villalonquéjar.
Seguimos por la amplia calle central del polígono, a la búsqueda del ramal de Vía Verde que proviene de Burgos y que el polígono industrial ha interrumpido. Conectamos con él, ahora carril bici girando a la izquierda un poco antes del hotel Las Terrazas. Atención aquí porque no se ve bien desde la calle principal.

Entramos en Burgos siguiendo el carril-bici habilitado sobre el antiguo trazado del ferrocarril.
Una vez en el carril bici, ya no lo dejaremos hasta penetrar en el casco urbano de Burgos, donde entramos por la avenida del Alcalde Valentín Niño. Tras llegar al río Arlanzón desde la calle León, cruzamos a la otra orilla para reincorporamos al carril-bici. Retornamos a nuestros lugares de origen. La Vía Verde aún continua hacia el sur, saliendo de la ciudad por el barrio de San Pedro y San Felices y Parque Europa en dirección a Cardeñadijo (ver entrada: Vía Verde del Santander Mediterráneo: de Burgos a Cojóbar).

Terminamos aquí esta interesantísima travesía ciclista por el sector NO. del Alfoz de Burgos. Hemos recorrido casi 40 kilómetros por pistas y caminos y visitado siete pueblos del alfoz norte. La excursión ha sido cómoda y agradable.

 

DE BURGOS A LOS MARMELLARES EN BICICLETA
Espacio natural
Páramos del norte de Burgos (Valles del Arlanzón y Ubierna)
Dificultad
Baja. El recorrido no tiene fuertes pendientes. la única dificultad será la orientación, por lo que hay que llevar GPS.
Tipo de camino
Pistas agrarias y caminos entre pueblos, carretera desde el polígono de Villalonquéjar a Burgos.
Ciclable
Sí.
Agua potable
Encontraremos agua en todos los pueblos por los que pasamos.
Tipo de marcha
Circular.
Orientación
Difícil. Llevar GPS para encontrar los caminos correctos entre pueblos ya que no hay ninguna señalización.
Época recomendable
De junio a octubre y con tiempo seco. El resto del año podemos encontrar fácilmente caminos embarrados e impracticables para la BTT.
Inicio
Burgos.
Tiempo total
Alrededor de 4 horas.
Tiempos de marcha
Burgos-Marmellar de Abajo:  Marmellar de Abajo-Villanueva Río-Ubierna: 1 hora 15 minutos; Villanueva Río-Ubierna-Burgos (Puente Santa María): 1 hora.
Distancia total
39,2 kilómetros.
Interés
Pueblos pintorescos, paisajes parameros, valles del Ubierna y Arlanzón.
Altitud mínima
833 m.
Altitud máxima
993 m.
Desnivel acumulado
493 m.
Mapas
1:50000: 0200 Burgos.
1:25000: 0200-1 Santibáñez-Zarzaguda; 0200-3 Burgos-Oeste.




 
Notas:
- Excursión en BTT fácil y placentera por terreno en su mayor parte llanos. La única dificultad que podemos tener es encontrar y seleccionar los caminos correctos en los muchos desvíos y en los pueblos por los que pasamos.
- Al pasar por varias localidades, podemos repostar agua continuamente.



Mapa topográfico



Perfil de elevación


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