Las Médulas

Las Médulas es uno de los principales atractivos naturales de la comarca del Bierzo, dentro de la provincia de León y también de España. Este excepcional paraje ha sido  originado de forma artificial en época romana, como resultado de la búsqueda de la excavación de oro. Con el paso de los siglos, el conjunto ha ido conformando  una personalidad paisajística propia. Hoy es un bellísimo paraje que podemos visitar fácilmente recorriendo sus senderos, bastante bien habilitados, y tanto por su interior como recorriendo las alturas que lo delimitan.

Las Médulasf

   

La ruta se inicia en el pueblo de Las Médulas, que dan nombre al paraje, y ubicada muy cerca de la localidad leonesa de Ponferrada. A la entrada de la localidad, aparcamos el coche, y salimos por la carretera que se adentra en la calle principal del pueblo.

Hay una oficina de información donde nos pueden asesorar sobre las diferentes rutas que se penden realizar según el grado de dificultad y duración.

Las Médulas.

Para la visita caminando de Las Médulas, hay dos opciones, la corta y la larga (ver mapa):

a) Corta: sigue la senda por el interior hasta el Mirador de Orellán y retorna por el mismo itinerario.

b) Larga: recorre todo el espacio perimetralmente, continuando por las Médulas de Yeres a través de la senda de Reiriego y pasando por al alto del mismo nombre.

En esta excursión, optamos por la larga, más completa, por lo que necesitaremos unas 4 horas para cubrir todo su trayecto. Durante todo el recorrido nos detendremos en varios miradores.

Mapa informativo de las dos rutas

El pueblo se desarrolla longitudinalmente y hay muchos establecimientos turísticos. Siguiendo su calle principal saldremos por la izquierda abandonando las casas y continuando por una pista de tierra que pronto se interna en el bosque. Este camino se encuentra algo abandonado pues ha estado inhabilitado bastante tiempo por presentar peligro de desprendimientos. Desde su inicio visualizamos los primeros penachos rojizos sobresaliendo sobre la vegetación y que son tan característicos de Las Médulas.

En unos quince minutos desde que abandonamos el pueblo, alcanzamos un pequeño alto donde divisamos por primera vez el interior.

Descendemos por un estrecho sendero que sigue pegado a la pared y alcanzamos el llano.

Enlazamos ahora con la pista que discurre por el interior, cómoda y amplia. Continuamos por ella hasta alcanzar la inmensa entrada de la Cuevona.

Entrada de la Cuevona.

Cerca, seguimos por el camino de Valiña, muy amplio y asfaltado pues ha sido habilitado para todo tipo de visitantes.

Camino del interior de las Médulas.

Llegamos al punto donde tenemos que desviarnos por la izquierda si queremos alcanzar el mirador de Orellán, punto obligado para todos los que visitan las Médulas.

Así pues nos desviamos e iniciamos una progresiva ascensión, en algunos tramos algo empinada, por el interior del bosque que tapiza la ladera. En unos 15 minutos, alcanzamos la cresta, desde donde accedemos enseguida al mirador de Orellán. Es éste un punto clave de Las Médulas al disfrutarse desde él las mejores vistas y es posible acercarse a él desde la carretera aunque hay que dejar el coche unos doscientos metros más abajo. encontramos bastante gente. Mientras descansamos y nos recreamos con el paisaje, merece la pena leer los paneles explicativos sobre el origen de las Médulas.

Preciosas vistas sobre el interior de Las Médulas. Anexo, visible desde la balconada, se halla la boca de la galería de Orellán, que visitamos.

Panorámica desde el mirador de Orellán.

Para acceder a la galería hay que pagar una entrada de 3 euros y se accede desde una caseta habilitada muy cerca del mirador.

La salida de la galería de Orellán vista desde el mirador.

El recorrido por el interior de la galería, practicada en época romana es muy interesante y fácil.

En unos doscientos  metros, se alcanza la balconada asomada sobre el vacío.

Vistas desde la balconada de la galería de Orellán.

Retornamos al exterior y al mirador. Continuamos la excursión pues aún hay mucho que recorrer y visitar. Hay que retornar hasta el punto desde donde accedimos desde el nivel inferior y seguir ahora hacia el otro sentido para continuar por una amplia pista que se desarrolla perimetralmente.

Alto de Placias.

Esta pista es cómoda y en unos diez minutos, nos saldremos de ella por la derecha para ascender hasta el Alto de Placias.(1022 metros), desde donde obtenemos también bellas vistas del interior.

Desde aquí continuamos ahora muy cerca del borde hacia el oeste. Estamos en Las Médulas de Reiriego, también llamado las Medulillas. Este camino se va estrechando cada vez más y se le denomina el sendero de Reiriego.

Sendero de Reiriego.

En algunos tramos muy angostos hay que andar con precaución al haber bastante patio a nuestra izquierda. A la derecha nos acompañan las altas paredes que caen a pico. La espesa vegetación en todo caso disimula un poco la caída. Pasamos por un par de oquedades o cuevas, restos de antiguas galerías hasta alcanzar un pequeño collado.

Merece la pena continuar unos 30 metros hasta alcanzar otra gran oquedad  que no llegó a convertirse en galería. Retornamos al collado y ahora emprendemos una ligera ascensión hacia el Alto de Reiriego. Es este el tramo más expuesto de toda la ruta. Por eso, hay una  maroma habilitada para asegurarnos en los puntos más angostos para ayudarnos a remontar entre la roca..

Enseguida alcanzamos el Alto de Reiriego. Espléndidas vistas del interior de Las Médulas, esta vez desde potra perspectiva diferente al Mirador de Orellán. A la izquierda, se visualizan unas lagunillas de origen artificial.

Buenas vistas también hacia el S-SE, cerrado por altas elevaciones de los Montes Aquilianos.

Video desde el Alto de Reiriego

Ya solo nos queda volver al pueblo y finalizar la ruta. Para ello continuamos por el camino para emprender inmediatamente el descenso, algo pronunciado, hasta enlazar con una gran pista que discurre a un nivel inferior.

El Alto de Reiriego visto desde la pista que retorna a Las Médulas.

Sólo nos queda retornar por esta pista  hasta el pueblo de Las Médulas, cubriendo los casi dos kilómetros y medio que nos separan del aparcamiento. Este sendero discurre un largo tramo bajo cubierta vegetal y penetra en el pueblo por el extremo sur de su calle principal.

LAS MÉDULAS
Espacio natural	Comarca del Bierzo (León)
Dificultad	Todo el recorrido es bastante suave en general. Sólamente pasado el Alto de Reiriego deberemos pasar por un tramo algo aéreo que puede echar o atemorizar a algunos
Tipo de camino	Senderos, caminos, sendas de montaña.
Ciclable	No.
Agua potable	No encontraremos, hay que ir pertrechados, sobre todo en verano.
Tipo de marcha	Circular.
Orientación	Está señalizado, aunque conviene llevar GPS.
Época recomendable	En general de abril a octubre. Evitar días nublados o con niebla, así como los calurosos de verano.
Inicio	Las Médulas (León).
Distancias	Ponferrada (25,6 kms); León (149 kms); Burgos (319 kms)
Tiempo total	Aproximadamente 3 horas y 15 minutos.
Tiempos de marcha	Aparcamiento-Mirador de Orellán: 1 hora 10 minutos; Mirador de Orellán-Alto de Reiriego: 1 hora; Alto de Reiriego-Aparcamiento: 45 minutos.
Distancia total	9,7 kilómetros.
Interés	Paisaje de las Médulas, galerías de Orellán.
Altitud mínima	739 m.
Altitud máxima	1021 m.
Desnivel acumulado	571 m.

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Notas:
- La excursión es en general sencilla y está bien señalizada. Como se ha referido, podemos elegir entre la ruta corta y la larga. Si se tiene tiempo y ganas, no hay duda que merece la pena la larga donde obtendremos una visión mucho más completa de todo el complejo histórico-natural de Las Médulas.

- Es muy aconsejable visitar las galerías del Mirador de Orellán, la entrada cuesta 3 euros.

- Las Médulas se hallan muy cerca de Ponferrada,. Es fácil acceder desde esta localidad donde podemos pernoctar y descansar.

- En el pueblo de Las Médulas hay varios bares y establecimientos para comer y refrescarnos.


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